¡Un delantal para hacer de todo!
Ponga en un recipiente la harina, el azúcar glas, la almendra molida, la mantequilla, el azúcar avainillado, el huevo y una pizca de sal. Ralle canela y cáscara de naranja para darle sabor a la masa.
Luego, amase la mezcla con las manos durante unos minutos. Una vez amasada, extienda la masa para mezclar bien todos los ingredientes.
A continuación, forme una bola con la masa y envuélvala en film transparente.
Coloque la masa en la nevera.
Separe la yema y la clara de un huevo.
Ponga el azúcar glas en un bol y añada la clara de huevo y un poco de jugo de limón. Bata la mezcla a punto de cinta. Puede añadir el colorante que desee para cambiar el color del glaseado.
Meta el glaseado en la nevera para que se endurezca.
Precaliente el horno a 200 °C.
Saque la masa de la nevera, ponga un poco de harina sobre la superficie de trabajo y extienda la masa con un rodillo. Use moldes para hacer galletas sablé en forma de corazón, estrella, abeto, luna... Colóquelas en una bandeja de horno y hornéelas durante 10 minutos a 200 °C.
Una vez horneadas, déjelas enfriar.
No ponga glaseado en las galletas sablé calientes.
Para hacer el cono para poner el glaseado, doble una hoja de papel de horno por la mitad en diagonal y córtela con unas tijeras. Colóquela con el ángulo recto en la parte inferior y enrolle el papel sobre sí mismo para formar el cono. Doble la parte superior de la hoja varias veces para mantener el cono enrollado.
Ponga el glaseado dentro del cono y decore sus galletas sablé como quiera.
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